Arte y juego en los pasillos de pediatría

Cápsula 1. Color en pasillos del hospital pediátrico. Encuentro a Jonathan, de 4 años, caminado en los pasillos de la sala de pediatría. Veo que mira los murales y le pregunto si tiene algún favorito. Corre hasta el león-árbol con pajaritos. La pintura de los murales es uno de los proyecto de arte y juego que he tenido la oportunidad de realizar como voluntaria en el Hospital Regional Materno Infantil de Alta Especialidad de Nuevo León, México. Como investigadora del proceso creativo en la infancia, no puedo dejar pasar la oportunidad de incluir en los diseños aspectos formales que incidan en la salud de los pacientes pediátricos. Tras algunas reflexiones, sumo al primer objetivo de humanizar el espacio, la territorialización y la educación artística de la mirada. Territorializar es el proceso que transforma el espacio en experiencia (Cabanellas, 2005). Las paredes blancas, así como mobiliario, objetos de salud, personal médico e inclusive el vocabulario que se maneja en el ambiente hospitalario, hace difícil que esto suceda. Los murales deben, entonces, facilitar el apropiarse del espacio, habitarlo para subjetivar el acontecimiento. En el caso particular de un evento de hospitalización, este trabajo psíquico resulta importante. El proyecto de decorar las paredes de los pasillos puede ir un poco más allá de hacer el espacio agradable a la vista. Se vuelve facilitador del proceso de territorialización desde el momento en que partimos de la experiencia infantil para provocar el encuentro. Para esto, se incluyen elementos del gusto de niñas y niños como lo son animales salvajes, barcos y aviones de papel, globos aerostáticos, papalotes, etc. Así, los pasillos de la sala de pediatría son ahora una invitación a recorrerse al paso lento que obliga la cirugía en recuperación, pero también para contemplar, imaginar, descubrir y dialogar sobre las formas, los colores, las transformaciones y los mensajes de juego, salud y cuidado que representan. El paciente pediátrico sabe que han sido pintados para él, además, en las composiciones descubre trazos de niñas y niños internados, de manera que puede intuir que hubo un infante como él participando de un momento feliz en el hospital.